INGREDIENTES:
- 200g. de champiñones.
- 1/2 cebolla o una pequeña.
- 200g. de harina de trigo.
- 1 litro de leche de soya.
- Salsa de soya.
- Vinagre de manzana.
- Pan rallado.
- Aceite Pam.
PREPARACIÓN:
Primero preparo lo que va a ser el relleno. Hay que picar la cebolla, y también los champiñones una vez lavados y escurridos.
Una vez picado todo, a la sartén con un chorro de aceite y un poco de sal y que se vaya cocinando lento, que la cebolla ablande. Hecho esto añade en la misma sartén los 200g. de harina, absorberá el líquido de los champiñones y cuando caliente pasa toda “la mezcla” a una olla y empieza a añadir la leche de soya. Hay que hacerlo poco a poco y removiendo para que no vayan quedando grumos. Según vaya calentando la leche, la bechamel va a ir espesando. Hay que seguir removiendo para que no se pegue y cuando empiece a hervir sigue removiendo unos minutos más para que la bechamel se haga bien y vas añadiendo un chorro de salsa de soya (un poco abundante, pero dependiendo de si es salsa de soya muy salada) y también un poco de vinagre (esto nada más por quitarle un poco el dulzor de la leche de soya). Puedes probar un poco en este punto, está riquísimo y así detectas si falta sal o lo que sea.
Hecho esto, retira la bechamel del fuego y la extiendes en un plato llano. Se deja enfriar al aire.
Ahora empieza lo divertido, hay que darle la forma a las croquetas. Para rebozarlas ponerlas en un plato hondo un poco de leche de soja y en otro pan rallado. Con una cuchara vas agarrando porciones de la bechamel ya fría y vas haciendo bolitas, luego las pasas por el plato de leche y luego por el del pan rallado.
El siguiente paso va a ser freírlas con aceite pam y en una sartén de teflón, acompáñalas con una rica ensalada.