Mantener nuestro sistema de defensas en excelente estado es muy importante y básico para evitar diversas enfermedades, este sistema mantiene los microorganismos fuera del cuerpo como son bacterias, virus y hongos.
Si bien la alimentación es determinante hay otras situaciones que debemos tener en cuenta como el estrés y la ansiedad, ambos pueden afectar la capacidad de nuestro sistema inmunológico y favorecer la aparición o contagio de diversas enfermedades.
Existen también algunas enfermedades como el Síndrome de Inmunodeficiencia adquirido (SIDA), lupus, cáncer y diabetes que disminuyen su capacidad de protegernos.
Cómo podemos saber si nuestras defensas están debilitadas? estos son algunos síntomas:
- Infecciones y/o resfríos recurrentes
- Alergias
- Enfermedades simples, que duran más de lo normal, demoran en curarse o se agravan
- Fiebre frecuente
- Ojos secos
- Cansancio habitual
- Náuseas y vómitos
- Diarreas
- Manchas en la piel
- Caída de pelo
También podemos realizar algunas pruebas en sangre para determinar nuestro estado de salud, las cuales deben ser recomendadas por un especialista, tales como:
- Hemograma
- Ferritina
- Vitamina B12
- Inmunoglobulinas
- Albúmina
- Globulina
Nos centraremos en el estilo de vida, el cual puede afectar su función protectora, como la falta de actividad física, el consumo de alcohol, ser fumador y una alimentación poco o nada saludable.
Los nutrientes cumplen un papel muy importante en el desarrollo y buen estado de nuestro sistema inmune o de defensas, en el caso de un déficit o falta de algún nutriente este sistema verá su capacidad de defendernos disminuida.
Algunos nutrientes específicos que debemos consumir con frecuencia:
- Cobre: es un antioxidante y contribuye en las funciones de las enzimas digestivas
- Hierro: si sus niveles están por debajo de lo saludable disminuye la capacidad de defensa de los glóbulos blancos
- Selenio: potencia la actividad de las células de defensa
- Zinc: en déficit se afecta el crecimiento y aumenta la aparición de enfermedades autoinmunes
- Magnesio: a menor consumo del necesario se presenta inflamación y envejecimiento
- Vitamina B6: en caso de déficit hay disminución de glóbulos blancos y respuesta alterada
- Vitamina B12: con niveles por debajo de lo normal se presenta disminución de células de defensa
- Vitamina C: aumenta la capacidad de las células de defensa, posee una gran capacidad antioxidante
- Vitamina A: en caso de déficit falla la capacidad de las células de defendernos
- Vitamina E: a menor consumo se deteriora nuestra capacidad inmune, nos protege de infecciones
- Vitamina D: estudios han demostrado una relación entre el déficit de esta vitamina y la incidencia de infecciones respiratorias
Qué alimentos debemos consumir con frecuencia para fortalecernos:
- Hierbas naturales y especias: ajo, cebolla, kión, orégano, cúrcuma, etc.
- Consumir alimentos ricos en Vitamina A y Betacarotenos: camote, zapallo, zanahoria, papaya, etc.
- Alimentos con Vitamina C: cítricos (naranja, mandarina, fresas, arándanos), pimientos, brócoli, kiwi, aguaymanto
- Zinc, es clave para nuestro sistema de defensas. Lo podemos encontrar en semillas de calabaza (las puedes incluir en tu avena o ensaladas), frutos secos y menestras
- Considera el tiempo que pasas al Sol diariamente para producir Vitamina D. En el caso de que no puedas estar 30 min al día con ropa clara o descubierta debes evaluar la toma de un suplemento según tus requerimientos por edad y sexo.
- Prebióticos: es la fibra, componente alimentario muy importante que interviene en la función del sistema inmunitario promoviendo el crecimiento de tu flora bacteriana
- Probióticos: bacterias con diversos efectos benéficos sobre el sistema inmune
- Evita el alcohol, azúcar y comida procesada (empacados, comida rápida, frituras, etc.)
En resumen, los consejos para mantenernos más protegidos son:
- Adecuado y frecuente lavado de manos
- Actividad física moderada
- Sueño reparador
- Manejo del estrés
- Evitar los lugares muy concurridos
- No consumir azúcar, comida procesada y/o rápida, grasas trans
- Consumir diariamente frutas y verduras
Espero que estos consejos te sean de ayuda, y no olvides mantener la calma… como se comentó al inicio, el estrés es un factor determinante que afecta la capacidad de nuestro Sistema Inmunológico
Lic. N.D. Mónica Bamonde CNP 4459